Persuasión

A esas formas de persuasión, (salario, respeto, dinero) no les doy ningún valor. Y no me voy a hacer médico o ingeniero, de modo que no te preocupes.

De hecho, voy a ser un vagabundo toda mi vida.

Él me dijo:
-¡Eso es peor todavía! Es preferible que seas ingeniero o doctor. ¿Vagabundo?

Ésa debe ser una profesión nueva.

¡Qué cosas se te ocurren! ¡Quieres ser vagabundo! Hasta ellos se sienten humillados cuando les dices: «Eres un vagabundo»; sin embargo, tú le estás diciendo a tu propio padre que quieres ser vagabundo ¡toda tu vida!

Le dije:
-Eso es lo que va a ocurrir.

-Si es así, ¿para qué quieres ir a la universidad?

-Porque quiero ser un vagabundo educado, no un vagabundo por debilidad -le contesté-. No quiero hacer nada en mi vida por debilidad, no quiero ser vagabundo por no haber podido ser otra cosa; ése no es mi estilo.

Antes quiero demostrar al mundo que puedo ser lo que quiera, y que a pesar de todo escojo ser vagabundo; desde mi fuerza.

Entonces tienes respetabilidad incluso si eres un vagabundo, porque la respetabilidad no tiene nada que ver con tu vocación, tu profesión; la respetabilidad tiene que ver con estar actuando desde tu fuerza, tu claridad, tu inteligencia.

Quiero que te quede meridianamente claro que no estoy yendo a la universidad para encontrar un buen trabajo.

Yo no he nacido para hacer unas cosas tan estúpidas, ya hay demasiada gente que se dedica a esas cosas. Sin embargo, un vagabundo culto, docto y educado hace mucha más falta, porque no hay muchos.

Los vagabundos que hay son gente de tercera clase, fracasados.

Primero, quiero triunfar de forma absoluta y luego darle un puntapié a todo ese éxito y ser sólo un vagabundo.

Autobiografía de un místico espiritualmente incorrecto. Osho