Hay ocasiones en la vida, cuando sientes que el cuerpo ya no te da más.
Sientes un gran agotamiento, un gran malestar.
Sientes que necesitas descansar, pero aún sigues pensando en que no puedes parar.
El trabajo, los estudios y/o los quehaceres cotidianos; te hacen pensar que es un lujo permitírtelo.
Tu cuerpo llegó a un punto en que te hace sentir muy mal para pedirte, exigirte un descanso, un cambio en tu estilo de vida.
Es tiempo en el cual debes parar de destruirte.
Escucha a tu cuerpo, a las señales, a las sincronías.
Meditando, para que descanses. Con mucha paciencia soporta ese dolor, vívelo, está allí por algo, está haciéndote recordar que hay algo que debes resolver.
Es cuestión de tiempo para que tu organismo se repare por sí mismo. De ti depende cuánto tiempo.
Todo pasa.
La medicina natural interactúa en tu cuerpo sin efectos secundarios.
Medita. Respira, siente, vive.
Lo que te sucedió es para que te conectes nuevamente con la fuente, para que recuerdes Quién Eres Realmente.
Y elijas Quién deseas Ser en estos momentos.
Así que no te rindas, solamente es un descanso.
Todo tiene solución, busca nuevas perspectivas, que tu alimento sea tu medicina. Por ello cuida tu alimentación. Alcaliniza tu sangre. Usa Tocosh, Maca, Uña de gato y diversas plantas que te puedan ayudar.
Sé por lo que estás pasando, lo he sentido, comprendo tu confusión.
Restablece tu sistema inmunitario.
Dedicado para la humanidad, en especial para aquellas personas que están pasando por un proceso de regeneración.
(17 de Abril 2012)
(17 de Abril 2012)
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